En la Mancomunidad de Australia, el país de los canguros y de los mejores
esquiladores de ovejas del planeta no hace más de 226 años que se
cultiva la vid, sobre todo en el sur. De entre los viñedos del sur
de Australia es Barossa Valley uno de los más antiguos, destacando
su clima cálido, su escasa lluvia y su vocación por vinos tintos de
calidad a partir de variedades francesas.
Las
primeras vides se trajeron en forma de esquejes desde Cape of Good
Hope (Sudáfrica), siendo Inglaterra, el eje del Imperio
Británico el principal receptor de este vino que poco a poco se
volvía más competitivo. Las castas de origen francés son las
predilectas, encontrándose por ejemplo Cabernet-Sauvignon,
Chardonnay o la Syrah, como es el caso de este reserva etílico (14'5 % vol.) y rudo como las llanuras por donde brincan los
canguros
Nota de cata: Significativo detalle lo de su abertura con rosca, tras
verter comprobamos que tiene capa media-alta a la vista con bastante
glicerina por la abundancia de lágrimas. Nariz etílica con aromas a
barrica principalmente, más tarde surge compota de frutos rojos y
flor azúl. Muy postivo olfativamente. En boca es goloso, etílico,
amplio y carnoso, con una acidez presente y un desarrollo muy cálido.
Culmina este vino con demasiada astringencia y una clara retronasal a
roble.
No hay comentarios:
Publicar un comentario