Uno
de los mejores vinos de este blog. Porque lo que bien empieza bien
acaba, y porque es la primera bodega de Pesquera de Duero donde se me
atendió personalmente. Hablo de bodegas María Ascensión Repiso,
con la mismísima a la cabeza gestionando un concepto de enoturismo y
de empresa familiar que por el resultado conseguido tienen mi reconociemiento.
La
bodega, o mini bodega, queda como un espacio muy manejable como pude
comprobar: sala de fermentación, dormitorio de barricas y área de
cata que hace también de almacén. Cómo un espacio tan limitado
puede producir un vino con tanta tipicidad y raza...
Nota de Cata: Mucho color y largas piernas. En nariz alta intensidad
aún sin oxigenar, predominando la fruta roja en compota adornada con
notas balsámicas. A la hora de la verdad, tras airear se vuelve
soberbio, aparece la especia dulce (6 meses en barrica) junto a toque
mineral (suelos arcillosos y calizos) y ecos lejanos de fruta blanca
de hueso.
Boca
amplia, afrutada y totalmente redonda. Equilibrio
entre la fruta en compota y la madera así como en la retronasal
(piel de naranja). Redondez absoluta en la que ataque-frescor-taninos conviven y persisten en boca largamente.
Un
pedazo Ribera, lo tiene todo. Producción limitada de 18ooo botellas
que en mi opinión merece la pena. A disfrutar con platos de caza menor como conejo o pollo y con toda gama de arroces. Muy muy recomendable.
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