Moscatel
de Alejandría dirigido al mercado neoyorquino, quizá para que sepan
a qué sabe esta variedad. Y es que este mercado, el norteamericano,
aprecia los vinos equilibrados y dulces, como el de hoy, que
llega desde bodegas Reymos (Cheste, en la subzona del Moscatel de Valencia).
Nota de Cata: Color plateado con destellos verdosos, poco común. Ni
una lágrima que evidencia su sólo 5% de contenido en alcohol. Nariz
intensa y varietal (flor blanca, miel, azahar, a tope de
melocotón...). Entrada dulce y amplia gracias al carbónico.
Franco desarrollo con ecos chispeantes que ya languidecen. Final
dulce y femenino donde vuelve la fruta blanca de hueso.
Muy
agradable de beber. El vino que le daríamos a una sobrina menor de
edad si nos dijera que se va de botellón sí o sí. Parece ser que
esta misma referencia se enfoca al mercado español bajo la etiqueta
de 'Moscato Blanco Amatista' y con un precio de 2,15 euros,
que a mi juicio son acertados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario