Nota de Cata: Una opacidad fiel al Pinot Noir tras abrir a principios del 2022. En nariz notas de fresa joven, frambuesa, violeta y sotobosque con decente intensidad aromática. Una entrada en boca de muy sutil redondez confesando su vocación sudista. Buen frescor, ese nervio de la añada junto a esa media/ligera estructura que lo hacen muy fácil de degustar. Sólo fruta roja joven y algunos herbales traviesos recorren el gaznate con energía y tensión confirmándose como un tinto para cualquier momento del día (13% vol).
La clarificación a través de métodos que excluyen la proteína animal convierten a este tinto en Vegano (por cierto los animales muy presentes en el marketing de esta gama, correspondiendo a este Pinot Noir un carnero). Pero su precio no es para nada cabrón, se queda sólamente en 6'90 euros que se ajustan a su marca IGP Castilla y a ese valor añadido que es, paradójicamente, evitar una sobredosis de sulfitos como hacen el 80% de las fábricas de vino españolas. Un Pinot ideal para tapear, para cualquier momento, para escuchar ese disco que le encanta. Recomendable.
Pues es una sorpresa no sabía que en Ciudad Real había vinos de esta variedad
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