No es la primera vez que probamos algo de Covides (Sant Sadurní d'Anoia), de la última vez no tenemos un gran recuerdo pero todos merecemos segundas oportunidades. El tiempo nos dió la razón y hoy día la marca que catamos ya no existe. Esta vez la marca es Gran Ferriol, que se congratula con un Merlot – Ull de Llebre sin añada que podría esconder un mosaico de viejas añadas o de lotes descartados por la cúpula directiva. Y sino desmiéntanoslo. Se ha elegido la corona para dar a entender al ama de casa que este puede llegar a ser el rey...de los vinos anti-crisis. Veamos si tiene tal honor.
Nota de Cata: Una capa media-alta justificada por la presencia de dos variedades de buena pigmentación. La orillita tiene tonalidades que podrían obedecer a una añada 17 ó 18. La nariz es muy discreta, tal vez uno de los puntos débiles de este Ferriol. Eso sí lo que se percibe es sólamente fruta y hace descartar cualquier infusión en chips. En el apartado gustativo una entrada seca o de ligera redondez que confirma efectivamente la presencia del Tinto Fino. A destacar la sedosidad y el buen trato al paladar (no todo iba a ser negativo). Breve estructura pero con un frescor agradable que trae al recuerdo fruta de baya. Final corto y con sobredosis de SO2.
Su precio de 2'15 euros responde a un contexto de desaceleración económica, es decir, que hemos dejado de crecer. No nos ha seducido este Gran Ferriol, yo lo siento mucho, y más considerando la denominació Penedès como una de las más importantes de Cataluña. Nos parece desacertado destinar este lote a un Penedés disponiendo de una D.O. regional como es la Catalunya. Y eso es lo que teníamos que decir de este tinto. Como maridaje unos Huevos ecológicos catalanes rotos con jamón.
Anda que no gana el merlot con un buen % de cabernet suviñon. Finura, frescor, elegancia,... el merlot solo, a mi, me cansa.
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