¿Cómo monto una explotación vitícola? (III)

Vale, ya has decidido que vas a sacar rendimiento a aquella parcela de viñas viejas de tu pueblo. OK, ya has seleccionado los elementos y zonificado el terreno que producirá la mejor materia prima por la que merece la pena emprender. 


Ahora, ¿Has decidido ya qué tipo de empresa te conviene más? ¿ Sabes si vas a asociarte con una o más personas para sacar adelante el proyecto? Conociendo los principales tipos de sociedades todo es más fácil, a continuación te mostramos un montoncillo de ellas para que puedas seleccionar la que abanderará tu sueño de vender tu propio vino / cosecha.



Sociedades sin personalidad jurídica propia

Comunidad de bienes: es una sociedad contractual en la que los miembros explotan un bien o derecho en común, repartiendo los beneficios de la actividad entre ellos.


Sociedad civil: se crean formalizando un contrato privado en el que dos o más personas se comprometen a contribuir dinero, bienes o trabajo con el fin de compartir los beneficios derivados.



Sociedades mercantiles capitalistas

Sociedad anónima: el capital es dividido en acciones y los socios no son personalmente responsables de los hipotéticos pufos de la empresa.


Sociedades de responsabilidad limitada: tienen capital dividido en participaciones sociales indivisibles, que son propiedad de los socios. Los socios no son personalmente responsables de las deudas de la empresa.


Sociedad comanditaria por acciones: el capital está dividido en acciones y por lo menos un socio administra la empresa respondiendo personalmente de las deudas de la empresa como socio colectivo. 



Si ninguna de ellas te convence tal vez deberías pensar en otras alternativas como entidades de capital-riesgo, sociedades de garantía recíproca, sociedad cooperativa, sociedad laboral o sociedades mercantiles personalistas. Hay muchas opciones si tienes clara tu idea, en el próximo post ahondaremos precisamente en ello.

1 comentario: