Mi abuela me decía que tuviera cuidado con los vinos sin añada. Con el paso de los años he de decir que con este vino la he desobedecido. Sí, porque tras probar dos de sus otras referencias confié ciegamente en la tercera. Sigan leyendo y sabrán por qué. Este vino combina dos variedades muy bien instaladas en Francia con dos autóctonas del Bajo Aragón que los hermanos Fandos y Barriuso han intentado interpretar a través de sus viñas en la zona baja del monte y el clima árido de esta parte de Teruel.
Nota de Cata: Color de media-alta opacidad, de un tono marronáceo que muestra un menisco evidentemente evolucionado. Lágrima lenta y densa que esconde 14% vol. En el apartado olfativo encontramos notas balsámicas en una primera nariz. Más tarde se suman notas animales, glándula de ñu fácilmente. La fruta muy muy eclipsada. En boca entrada amplia y redonda. Desarrollo donde la fruta madura está más presente, equilibrándose con los terciarios. Frescor convincente. Paso en boca especiado, con buen volumen y cuerpo. Final amargoso y de tanino pulido pero donde un caballo desbocado irrumpe violentamente jodiendo el conjunto.
Este caldo de 3'99 euros está de venta en Erosqui y para nada es el mejor de bodegas Fanbar. Si pueden, prueben su cuvée Todo Monte barrica (que comparte ensamblaje, es decir Syrah – Royal de Alloza – Cabernet de Sauvignon – Romero de Híjar). Su tinto Garnacha Val de la Reina también es recomendable. Como maridaje a estos vinos salidos de Samper de Calanda, pruebe el queso que sale de la misma empresa. Nos referimos al queso curado de leche cruda de oveja que es el que maridará de cojón con este Monte Bajo. Imagínese una troncha de pan de pueblo tostado y encima, un tajo del queso de oveja que salvará el vino.
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